Una familia en Texas se inspira para servir con Samaritan’s Purse después que un equipo de voluntarios ayuda a sacar el lodo y limpiar su casa inundada.
Los Ávila despertaron el martes 2 de mayo y escucharon el agua rugir en su hogar y subir por las paredes. El arroyo burbujeante detrás de su casa en Livingston, Texas, amenazaba con arrasarlos. Caminaron contra el torrente y al final encontraron seguridad. Mientras la propiedad se destruía, los Ávila vieron años de duro trabajo fluir en un santiamén.
El sureste de Texas recibió montones de lluvia a finales de abril y principios de mayo, lo que provocó inundaciones generalizadas que dañaron hogares y negocios en la región. Para los Ávila, la tormenta resultó trágica. Las aguas inundaron y dañaron de forma permanente los cimientos de su casa, que construyeron recientemente después de comprarla hace ocho años.
“Parecía que estaba en el Titanic”, dijo Laura Ávila. “Estábamos abrumados. Fueron cinco minutos de pánico”.
Laura y Hugo emigraron a los Estados Unidos desde México hace 12 años y han vivido en Livingston desde entonces con sus tres hijos y los padres y la hermana de Laura. Comenzaron una compañía de limpieza y mantenimiento, y trabajaron duro para comprar la propiedad en su nueva ciudad y su nuevo país. Aun así, Laura mantuvo la fe de que Dios tenía un plan para la familia.
“Sé lo que le digo, parecía que nos ahogábamos, pero no fue así. ¿Por qué? Porque Dios tenía un propósito para nosotros”, dijo la madre.
Poco después, los voluntarios de Samaritan’s Purse llegaron a la propiedad de los Ávila y se pusieron a trabajar. La familia vio la luz de Cristo a través de los voluntarios mientras removían los escombros, sacaban el lodo y recuperaban sus objetos valiosos. Esto hizo que Laura, Hugo y su hijo mayor Ronaldo se pusieran las camisetas naranjas y fueron parte de los voluntarios de Samaritan’s Purse en su comunidad.
“Ayudar a otros es hermoso, ¿verdad?” ella dijo. “Pero ahora se trata de ayudar a quienes no conocen a Jesucristo para que lo conozcan; ayudarles a tener paz, tranquilidad, conocer a Dios y seguirlo. Si no van a una iglesia, que puedan ser parte de una. Todo esto es ayudar en el nombre de Cristo. Así luce poner a Dios antes de todo lo demás”.
Samaritan’s Purse llegó al sureste de Texas unos días después de que la inundación creara caos en la región, y los equipos de voluntarios siguen proveyendo ayuda a las familias que se duelen, y lo hacen en el nombre de Jesús. Por favor, sigue orando por los miles de familias, como los Ávila, que todavía se recuperan de las inundaciones, y ora por la iglesia local ahora que nuestra respuesta se acerca a su fin.
Samaritan’s Purse también está ayudando actualmente en Florida, Iowa, Minnesota, Nuevo México, Texas, Oklahoma y Arkansas. Tenemos oportunidades de voluntariado disponibles.