Los niños con poco acceso a las Buenas Nuevas de Jesucristo reciben cajas de regalos de Operation Christmas Child y participan de nuestro programa de seguimiento y discipulado, La Gran Aventura.
El pastor Soja sabía que había dos palabras que la gente Bara no quería escuchar: “Jesús” y “oración”.
Formada por más de un millón de personas, esta etnia habita el sur de Madagascar, el país insular frente a la costa oriental de África. Cuartaros de oficio, se caracterizaban por el hurto, la violencia y la marginalidad.
Quince de las aldeas, en particular, rechazaron que el gobierno se involucrara. Así que, en lugar de mandar a sus hijos a la escuela, los Bara les dieron rifles de madera para jugar, y así capacitarlos desde niños para perpetuar la hostilidad que ha dominado por generaciones.
Los eventos evangelísticos comparten el Evangelio y regalos
El pastor Soja, un plantador de iglesias que supervisa docenas de iglesias en el sur de Madagascar, sintió que Dios le decía: “Esta es tu misión final: alcanzar a los pueblos de Esira”.
En obediencia, tres años atrás comenzó a construir relaciones con las personas de esta remota región. Preguntó a uno de los jefes tribales lo que necesitaba y él respondió: “Necesitamos escuelas. No escuelas del gobierno, sino privadas”.
El pastor Soja vio esta como una puerta abierta, no solo para la educación, ¡sino para el Evangelio de Jesucristo!
Mientras el pastor Soja y un equipo de maestros iban a Esira para establecer escuelas, los colaboradores ministeriales de Operation Christmas Child los equipó con 2500 cajas de regalos para los niños. Después de seis horas en terreno peligroso, el equipo finalmente llegó a la aldea Bara y presentó el Evangelio a los niños mientras los padres, portando rifles, escuchaban en las orillas. Para su sorpresa, 75 por ciento del grupo alzó la mano para indicar que quería recibir a Jesucristo como Salvador.
El equipo tuvo eventos similares en siete aldeas más y nuevamente vieron una recepción abrumadora al mensaje del Evangelio. Algunas de las madres se acordaron de una iglesia que quemaron muchos años atrás. “¿Podemos volver a orar?”, preguntaron.
Los miembros de las tres aldeas expresaron interés en establecer una iglesia.
El pastor Soja encontró a un pastor que vive en Esira y ahora supervisa estas nuevas congregaciones. Los creyentes locales ahora ofrecen el curso La Gran Aventura, para que los niños que recibieron las cajas de regalos puedan aprender cómo seguir a Jesús y contar a otros de Él.
Las cajas de regalos fomentan la educación
Hoy, cerca de 800 niños asisten a las nueve escuelas privadas que el pastor Soja y su equipo empezaron. Los regalos de Operation Christmas Child ayudaron a que aumentara la matrícula.
Cuando los niños encontraron lápices, cuadernos y reglas en sus cajas de regalos, corrieron a los colaboradores y dijeron: “Quiero aprender cómo usar esto. Quiero aprender a leer. Por favor, quiero ir a la escuela”.
En las aldeas sin escuela, los padres se acercaron al pastor Soja y le rogaron: “Nuestros hijos tienen los útiles, ¿podemos tener ya una escuela?”
El pastor Soja ve esta recepción como un milagro.
“Solo dos cosas pueden cambiar estas aldeas, la transformación espiritual y la educación”.
“Solo dos cosas pueden cambiar estas aldeas”, dijo. “La transformación espiritual y la educación”.
Con iglesias y escuelas ahora listas, está convencido de que romperán el ciclo de violencia y pobreza (tanto espiritual como física) que ha tenido atrapados a los Bara por generaciones.
Los juguetes representan diversión y juego
Con la llegada de las cajas de regalos de Operation Christmas Child, los niños Bara han aprendido a jugar de una manera saludable.
Están aprendiendo a usar balones de futbol y canicas en lugar de esos rifles de madera y la violenta práctica de lanzar rocas y semillas a los demás. Esto trajo serias heridas, y provocó juramentos de venganza entre familias.
Ahora, el fútbol soccer es el juego más famoso en las aldeas Bara y los adultos se unen a la diversión.
Un llamado a orar
¿Oras con nosotros por estos pueblos en la región Esira de Madagascar? El pastor Soja sabe que la batalla por las mentes, los corazones y el futuro de la gente Bara es una espiritual. Al recordar los eventos evangelísticos de Operation Christmas Child donde compartió el Evangelio y distribuyó las cajas de regalos, dijo: “Mientras estábamos con los niños, pudimos sentir sus oraciones”.
Por favor, ora que el Evangelio siga adelante con poder. Ora que un grupo de jóvenes evangelistas se levante a través del programa de discipulado La Gran Aventura para compartir el Evangelio con sus familias y comunidades. Ora porque los nuevos creyentes permanezcan fieles a Cristo mientras enfrentan persecución por esta nueva vida.
Ayúdanos a celebrar 30 años de Operation Christmas Child ¡empacando cajas de regalos! La semana nacional de recolección es del 13 al 20 de noviembre.