Un distrito de escuelas luteranas empaca cajas de regalos de Operation Christmas Child y ven la transformación en estudiantes y familias.
“Queremos ayudar a hacer discípulos. Queremos que los niños sepan que el Creador del universo los ama. Queremos que los niños sepan que Jesús murió por sus pecados, aunque no lo merecía. Pero su amor es incondicional”.
Kimberly Hahn, directora de operaciones de la preparatoria Orange Lutheran en California, se desborda al hablar del corazón detrás de la participación de su escuela con Operation Christmas Child.
“A los luteranos nos importa mucho la gracia. El gozo de recibir un regalo puede traer a un niño a la comprensión de qué es la gracia”, dijo. “Así que nos dijimos: ‘Repartamos gracia, un regalo no merecido ni ganado, que es gratuito e incondicional’”.
Es un mensaje transformador para cada niño que empaca y recibe una caja de regalos. Todos necesitan saber y comprender el regalo gratuito de salvación en el Evangelio de Jesucristo.
La escuela de Kimberly es una de las 149 escuelas en California, Arizona y Nevada que forman parte del distrito del Suroeste del Pacífico del sínodo de escuelas luteranas Missouri. Han empacado decenas de miles de cajas para niños en los años recientes.
“No se trata de la cantidad sino del impacto en el reino”, dijo Jackson Theisfeldt, director de la escuela St. Paul también en Orange, California, y reflexiona en el día de capilla en que cada alumno desde kindergarten hasta octavo grado trae sus cajas de regalos.
Comunicar el Evangelio
Connor Boburka, un estudiante de séptimo grado del equipo de baloncesto en St. Paul, ve con claridad cómo Dios puede usar el equipo deportivo que ama para empacar las cajas de regalo. “Es el amor de Dios a través de mí. Me usa como un discípulo suyo para esparcir su amor a los lugares que no conozco. Podría ir a África, Asia, o cualquier lugar del mundo”.
Su consejo para los que nunca han empacado es: “Asegúrate de esparcir el amor de Jesús en tu caja de regalos. No pongas algo que cueste 99 centavos. Gasta un poco de dinero para ayudar a un niño”.
Rylie Ruiz, estudiante de octavo grado en la escuela luterana en Rancho Palos Verdes, California, explica lo que importa: “Cuando empaco una caja, recuerdo que el mensaje de Cristo va adentro, así que deseo que sea especial”. Su parte favorita es empacar todo de color rosa para una niña especial.
Sin importar lo que pongan en las cajas, los estudiantes de la preparatoria Orange Lutheran se conmueven ante la realidad de que este regalo comunica el Evangelio de Jesucristo a un niño.
“Realmente los niños entendieron que lo que pudieran estar creando podría señalar la salvación para otro niño. Y esa es una gran responsabilidad”, dijo Rachel Eklund, quien sirvió en el liderazgo de las actividades estudiantiles de la escuela durante 20 años y ayudó a facilitar el empaque de las cajas de regalos. “Creo que ellos, aunque son adolescentes, pueden comprender la importancia de lo que hacen”.
Equipar a los estudiantes a pensar más allá
Harry Bagramian Jr, co-presidente estudiantil en la preparatoria Orange Lutheran y en su último año, dijo que es importante pensar más allá de uno mismo, y considerar al niño al otro lado del mundo. ¿Cómo es su vida? ¿Qué miedos tienen? ¿Cuáles son sus esperanzas y sueños?
“Está bien porque estamos esparciendo la Palabra de Dios”, dijo. “En nuestra escuela, la misión más grande es compartir la Palabra de Cristo, así que está bien ver cómo esto puede unirse en el mundo a través de estas cajas para otros niños, también”.
Ashley Kiltzing, la maestra de arte de St. Paul y madre de uno de los alumnos, aprecia cómo el empacar las cajas ayuda a que los niños se concentren en otros.
“Ayuda a que piensen más allá de sí mismos y fuera de su burbuja”, dijo ella. “Muchas veces, se asombran de que otros niños quizá no tengan cepillos de dientes o calcetines y otras cosas que ellos dan por sentado. Es muy lindo ver cómo se dan cuenta que pueden bendecir a otros niños en otros lugares con cosas sencillas”.
Otro padre de familia y directora asistente, Samantha Fulton, se da cuenta que es bueno que los niños sepan que otros niños tienen necesidad.
“Hay niños en otras partes del mundo que no tienen una vida de bendición”, dijo. “Usamos las cajas de regalos para enseñar a los niños a ser agradecidos con lo que tienen”.
Comprender y dar el Evangelio
Los estudiantes que no conocen al Señor todavía, al empacar cajas de regalos pueden venir cara a cara con el Evangelio de Jesucristo.
“Me emociona saber que algunos niños que empacan cajas no conocen el amor de Jesús todavía”, dijo Han, quien sirvió como maestro de teología antes de su puesto actual. Mientras trabajan en llevar gracia a los niños del mundo, es emocionante saber que algunos estudiantes también sabrán del amor de Dios por primera vez.
Elkund ve que las cajas de niños también ayudan a los niños a superar sus miedos de evangelizar.
“Qué manera tan buena de que un estudiante pueda compartir su fe de un modo sencillo”, dijo Eklund. “Sea empacando una caja o diciéndole a un amigo sobre qué hizo en su día escolar… Abre la puerta para que compartan su fe en una manera que no intimida”.
Este evangelismo también ocurre con los estudiantes más jóvenes que traen a casa una caja vacía y le cuentan a sus padres sobre la oportunidad de bendecir a un niño en el extranjero. Esta sencilla oportunidad para ser generoso ayuda a las familias no creyentes a escuchar las Buenas Nuevas.
La directora de Christ Lutheran School dijo: “Cuando comienzas con los niños, y lo vemos, ellos se vuelven los embajadores más grandes de Jesús. Cuando Jesús toca sus corazones, lo comparten con sus padres, sus familiares, sus tíos, sus abuelos. He visto a abuelos y padres venir a la fe por lo que sus hijos aprenden aquí”.
La directora asistente Fulton explicó: “Hemos visto familias que no conocían a Jesús. Solo porque sus hijos están en esta escuela, les ha hecho conocer al Señor. Ahora vienen a la iglesia cada domingo. Hemos visto familias enteras bautizarse”.
Your own Operation Christmas Child gifts can have a similar influence even before they bless a child in need overseas. So, don’t wait to empacar cajas. La semana nacional de recolección será del 13 al 20 de noviembre cuando 4500 centros de recolección se abrirán en el país para recibir tus regalos.