Después de someterse a una cirugía cardiovascular en las Islas Caimán, por intermedio de Children's Heart Project, Fátima y su hija de 2 años, María, pueden vivir una vida normal, con esperanza y propósito.
A la joven madre boliviana le presentaron Children’s Heart Project, el ministerio médico de Samaritan’s Purse, cuando su hija necesitaba atención médica por su estado grave. Fátima Ramos Cardozo y su hija, María, padecen la misma cardiopatía: defecto septal auricular, un defecto cardíaco que consiste en un orificio en la pared del corazón que separa las cavidades superiores. A través de los cuidados intensivos de los doctores asociados con Samaritan’s Purse, Fátima y su hija de 2 años viven por primera vez una vida esperanzada.
“Estoy feliz y agradecida de que mi hija no tenga que vivir lo que mismo que yo”, dijo Fátima al reflexionar sobre la cirugía. “Es como si me hubieran quitado un peso de encima”.
Aunque al principio solo pensaban revisar a María, el personal de Samaritan’s Purse en Bolivia rápidamente se dio cuenta que Fátima también necesitaba una cirugía urgente. Como aún es menor de edad, Fátima cumplía los requisitos para una cirugía de parte de Children’s Heart Project, junto con su hijita, en el Health City de las Islas Caimán.
El jefe de cirugía, el Dr. Binoy Chattuparambil, operó a Fátima y a María el mismo día. Tras las cirugías exitosas, madre e hija ya no tienen que vivir con miedos ni dudas, sino que pueden dar gracias a Dios por el latir de su corazón en su pecho.
Tanto Fátima como su madre, Pura, han aceptado a Jesucristo como su Salvador personal, quien ha sanado sus corazones para la eternidad.
“El poder de Dios existe”, dijo Pura con lágrimas en los ojos. “Quiero darle gracias a él, siempre a él primero”.
Fátima (izquierda) y su hija María (derecha) padecen la misma afección cardíaca fatal: defecto septal auricular.
