Samaritan’s Purse continúa proveyendo de cuidado médico crítico para familias desplazadas en esta región de conflicto.
Tayech Melkamu* tenía miedo durante varios días de que su hija de diez años, Miheret, se debilitará aún más.
Tayech Melkamu* y su hija de 10 años, Miheret, agradecen por el tratamiento que salvó la vida de la niña.
“Empecé a perder la esperanza”, dijo Tayech. “Después de esta crisis, y ahora mi hija enferma”.
El equipo de Samaritan’s Purse conoció a Tayech y a su hija en una de nuestras unidades médicas móviles, entre las cuatro que hay operando en el norte de Etiopía como parte de nuestra respuesta continua en la región.
Al final de un largo año, Tayech llegó con sus tres niños más jóvenes al campamento de refugiados de Jarra en la provincia de Amhara, Etiopía.
Sus dos hijos mayores, que proveen el sustento de la familia, tuvieron que huir el año anterior para evitar ser reclutados por el grupo armado que ocupó la aldea.
“Cuando se negaron”, dijo Tayech, “los amenazaron y enfrentaron golpizas y latigazos. Tuvieron que huir para salvar sus vidas”.
Después que sus hijos huyeron, ella siguió trabajando un año para evitar abandonar su casa. Pero con el paso del tiempo, su dinero escaseó pues no alcanzaba lo que ganaba cocinando para otros o vendiendo cosas de su casa. No podía alimentar a sus propios hijos. Se fue en desesperación.
Cuidado médico que salva en el campamento
Cuando llegaron al campamento Jarra, Miheret ya estaba enferma y Tayech se dio cuenta que era algo más que el calor. La tos persistente y la lesión en su cabeza mostraban algo más serio. En días, su hija ya no podía caminar y ni pararse.
Miheret está contenta por estar saludable otra vez y disfruta sus amistades.
“Entonces la cargué y la llevé en mi espalda”, dijo, recordando el día que decidió llevar a Miheret a la unidad médica móvil en el campamento.
Uno de nuestros doctores le hizo un análisis que confirmó rápidamente el diagnóstico de falla cardiaca. Le pusieron medicina intravenosa y la llevaron en ambulancia al hospital más cercano. La decisión de la madre de llevar a Miheret a la unidad médica, combinada con el esfuerzo de nuestro equipo, salvó la vida de la niña. ¡Gracias a Dios!
“Si mi hija no hubiera recibido ayuda inmediatamente, habría muerto ese día”, Tayech dijo. “Venir aquí fue como ver que mi hija volvía a nacer”.
Respuesta continua médica en Etiopía
Nuestra unidad médica móvil provee evaluación y cuidados básicos primarios, y referencias a hospitales para condiciones médicas más complejas. En algunas áreas, proveemos ayuda siquiátrica, farmacia y laboratorio.
Nuestros equipos médicos ven a cientos de pacientes al día en nuestra unidad médica móvil en el norte de Etiopía.
“Son grandes las necesidades”, dijo Sarah Benson, la coordinadora médica para Samaritan’s Purse en el norte de Etiopía. “Cuando llegamos, el gobierno local solo ofrecía cuidados básicos, y la población desplazada creció exponencialmente. Entonces nos pidieron ayuda”.
El Dr. Sied Merbu, un médico etíope sirviendo con Samaritan’s Purse dijo que las unidades médicas móviles son de gran impacto.
“En nuestra ubicación, vemos a más de 100 pacientes al día”, dijo. “Muchas vidas se salan por el trabajo aquí y en el país”.
Más de 1.7 millones de etíopes se han desplazado de sus hogares por el conflicto, y Samaritan’s Purse les provee de ayuda médica y de alimentos en la región desde febrero 2021, lo que requirió muchos vuelos de nuestro DC-8. Seguimos cuidando a estas comunidades heridas mediante distribución de comida y cuidado médico. Tamibén hemos ayudado a proveer a los centros de salud con suministros y equipo que pueden usar para operar otra vez.
Desde febrero 2021, Samaritans Purse ha estado respondiendo en el norte de Etiopía con ayuda médica y alimentos para los desplazados.
