Un pastor tuvo la visión de alcanzar con las Buenas Nuevas a este grupo ignorado.
El pastor Paata tiene un gran objetivo: alcanzar con las Buenas Nuevas de Jesucristo a cada familia que incluya una persona sorda en el país de Georgia. Él ha encontrado una herramienta estupenda para entablar conversaciones con niños sordos o con un hijo de padres sordos que tiene la capacidad de oír: las cajas de regalos de Operation Christmas Child. Paata, que es sordo, dijo acerca del proyecto: “Para nosotros, es una gran bendición y una oportunidad compartir el Evangelio”.
Paata está radicado en la ciudad capital de Tiflis, pero organiza eventos de evangelismo por todo el país, de casi cuatro millones de personas, para distribuir los regalos. Hay muchos miles de personas sordas en todo el país.
La iglesia donde sirve Paata ha entregado cajas de regalos a los niños durante muchos años, pero en los últimos tres años, él ha hecho un esfuerzo especial para alcanzar a la comunidad de sordos. En Georgia hay dos escuelas para alumnos sordos: una en Tiflis y una en Kutaisi. Este año, el pastor se puso en contacto con ambas escuelas y entregó más de 300 cajas de regalos.
Las familias ven la felicidad de los niños después que reciben las cajas de regalos. Les preguntan a los niños: “¿Quién te dio esta caja de regalos? ¿Qué es eso?”. Paata dice que esta es una oportunidad para abrir la Biblia y hablar sobre Jesucristo con toda la familia.
Akaki es un joven sordo que trabaja estrechamente con Paata. Él recibió una caja de regalos cuando era un niño. “Akaki me apoya no solo con Operation Christmas Child, sino también en el ministerio”, dice Paata. “Estoy orientándolo para que sea un futuro ministro”.
Akaki recuerda que en la caja de regalos había muchas cosas bonitas, pero además había una foto de la familia que había empacado la caja. Contó Akaki: “No entendí la carta porque no sabía leer en inglés, pero cuando vi la foto de la familia, supe que eran las personas que me enviaron la caja de regalos”.
Él está viajando con Paata y apoyándolo este año; lo ayuda a distribuir las cajas de regalos y trabaja con los niños en toda Georgia. Akaki sugiere que cuando empaquen en oración las cajas de regalos se incluya algo especial para un niño sordo: tal vez, una historieta o libros de cuentos ilustrados que no requieran que alguien tenga que leerlos.
“Damos gracias a Dios porque tenemos la oportunidad de compartir el Evangelio a través de este ministerio”, dijo. “Y estamos muy agradecidos a las personas que nos apoyan”. Además, afirma que tener los regalos de Operation Christmas Child facilita el compartir a Cristo porque las personas están más abiertas a una nueva relación cuando reciben un regalo.