La nueva misión de Brad Chandler es servir en el nombre de Jesús a los propietarios que sufren. Esto a través de Samaritan’s Purse, y es una misión que él y su esposa Tammy pueden hacer juntos.
Su misión ese día en St. Louis fue salvar un hogar donde el moho se había extendido. El dueño y su madre de 85 años todavía vivían dentro y respiraban las tóxicas esporas.
“Realmente no puedo creer que vivieran ahí”, dijo Brad Chandler, quien estaba sirviendo como voluntario de Team Patriot, un proyecto de Samaritan’s Purse que despliega exparticipantes de Operation Heal Our Patirot y reconstruyen con equipos de North American Ministries. “Si no hubiéramos llegado, no sé quién les habría ayudado”.
Como un Marine jubilado con 27 años de servicio y 12 despliegues, Brad ha visto bastantes desastres, pero aun así se sorprendió por lo que vio en agosto en St. Louis.
“Estaba en shock”, dijo Brad al recordar las condiciones en que la familia había vivido desde las inundaciones en julio, cuando casi 30 centímetros de agua cayeron en ocho horas. “Habían estado ahí durante un mes y todo se había arruinado. Había montones de basura. Y nadie les ayudaba”.
Brad y otros voluntarios de Team Patriot movieron montones de basura de la casa, incluyendo muebles, posesiones, paredes y pisos. Todo lo arruinado y los materiales de la casa formaron una pared de casi trescientos metros en la calle. Cuando todo lo arruinado se sacó, la madre y la hija pudieron comenzar de nuevo con esperanza y sin miedo al moho
Al final de su trabajo, Brad dice que le dieron al propietario una Biblia firmada por el equipo, lo que la conmovió profundamente. Remplazaría la Biblia vieja que perdió en la inundación.
“Rompió en llanto”, recuerda Brad. “Fue un gran honor ver el gozo y la esperanza volver a sus vidas otra vez”.
Un hombre nuevo después de Alaska
Brad conoce una o dos cosas sobre empezar de nuevo después de la destrucción, pues así se sintió cuando dejó el ejército.
Cuando Brad y su esposa Tammy llegaron a Samaritan Lodge Alaska en 2019 para Operation Heal Our Patirots, estaban desesperados por un cambio y esperanza. Sus décadas de despliegues dejaron cicatrices, físicas y emocionales, y provocó sufrimiento en su matrimonio.
“Tuve que vivir con estrés post traumático y trabajé hasta el cansancio para no lidiar con lo que había en mi cabeza. Me cansaba hasta dormir”, dijo Brad. “Por la noche, tenía pesadillas”.
No había escape ni indulto. Un amigo, que conocía sus problemas, les contó sobre Operation Heal Our Pariots.
“No reconocí nuestra necesidad hasta que llegamos a Alaska”, dijo Tammy. “Después de 27 años en el ejército, veíamos todo normal”.
En Alaska, por medio de clases y conversaciones con los capellanes y otras parejas, los Chandler descubrieron muchas cosas de sí mismos y del otro. Y aprendieron que hay muchas parejas y veteranos que luchan con las mismas batallas dolorosas.
“Vimos que no éramos los únicos”, dijo Tammy. “Y creo que a Brad le ayudó ver que sus heridas eran reales, aunque no fueran físicas o visibles”.
Tanto Brad como Tammy recibieron a Jesucristo como Señor y Salvador unos años antes de venir a Alaska, pero ese tiempo marcó un momento de profundizar su fe y fortalecer su matrimonio. Brad recordó el propósito y el valor que tiene debido a su vida en Cristo. También tuvo la increíble experiencia de bautizarse por primera vez en las frías aguas del lago Clark.
“Cuando dejas el servicio, dejas el ambiente donde sabes qué se siente lograr cosas importantes con tus hermanos”, dijo Brad. “Cuando sales, quieres encontrar el mismo sentir”.
“No lo pude encontrar en el VFW o la Legión Americana. Pero entonces encontré a Cristo y a Samaritan’s Purse. Cuando Team Patriot se anunció en la reunión de 2019, encontré una misión en la que puedo participar con otros veteranos. Restauró un sentido de llamamiento y para nosotros como pareja. Los militares aman una misión. Como creyente, amo la misión de compartir el Evangelio y ver el gozo regresar a los rostros de las personas”.
El servicio juntos impulsado por la nueva libertad en Cristo
Casi un mes atrás, antes de ir a St. Louis, Brad y Tammy fueron a Mora, Nuevo México, para su primer despliegue con Team Patriot.
“Fue maravilloso”, dijo Tammy y mostró algunas de las habilidades que aprendió, como usar una sierra para lidiar con árboles caídos. También valoró las historias de los propietarios a quienes pudieron ayudar. La pareja se marchó con un fuerte sentido de misión compartida, la que empezó en Alaska y se fortaleció en Mora.
“Pudimos conectar en lugar de aislarnos”, dijo Tammy. “Pudimos trabajar más en un equipo centrado en Dios. Sentó un nuevo precedente en nuestra vida de trabajo juntos y de darnos cuenta que debíamos depender de Dios”.
Brad dice que Operation Heal Our Patriots y Team Patriot los pusieron en un camino de sanidad y servicio, un camino que paso a paso los sincroniza.
“No conocía al Señor cuando estaba de servicio”, dijo. “No le di mi vida al Señor hasta los 51 y este es nuevo propósito y llamado. Es una nueva misión, una en la que Tammy y yo estamos juntos”.