Franklin Graham acompaña al personal para animar a los habitantes de las montañas, obsequiando los autos y las camionetas que tanto necesitan las familias devastadas por la tormenta.
Samaritan’s Purse continúa asistiendo a las familias de Carolina del Norte y de Tennessee que aún no se recuperan tras el huracán Helene, la tormenta que devastó la región a fines de septiembre del 2024.
Franklin Graham comparte un momento de alegría con una agradecida habitante de Carolina del Norte.
“Estos vehículos fueron provistos por el pueblo de Dios, en el nombre de Jesús”, dijo el presidente de Samaritan’s Purse, Franklin Graham, durante la dedicación de once vehículos para los sobrevivientes del huracán.
Harry Varney perdió compañeros de trabajo aquella noche en que él y otros apenas lograron escapar de la fábrica donde trabajaban. Los sobrevivientes aguantaron la inundación del huracán Helene en una gran tubería de PVC.
Su empleador desapareció en la inundación, y su vehículo de trabajo quedó arruinado. Él dependía de ese automóvil para buscar trabajo y para transportar sus herramientas a las obras que hacía en la comunidad.
Harry Varney y su familia celebran la bondad de Dios después del paso de la tormenta.
“No solo soy afortunado”, dijo él. “Soy bendecido por Dios. Él derramó bendiciones sobre nosotros después de la tormenta”.
Esas bendiciones incluyen la nueva camioneta Toyota Tacoma que Samaritan’s Purse le proveyó el 10 de abril en la Alliance Bible Fellowship, en Boone, Carolina del Norte.
Desde que el huracán Helene asoló las montañas el año pasado, Samaritan’s Purse ha limpiado viviendas y propiedades, ha provisto casas rodantes, ha reemplazado viviendas móviles, ha comenzado las tareas de reconstrucción y ha reemplazado 180 vehículos al día de hoy. Lo más importante es que damos gracias a Dios por la gran cantidad de personas que han recibido a Jesucristo como su Señor y Salvador a través del testimonio de los miembros del personal, los capellanes y los voluntarios.
Nuestro personal ora por Zack Sparks y le da ánimo.
Zack Sparks, un veterano del Ejército por la guerra en Irak, perdió su camioneta Chevy S-10 1996, el vehículo que lo ayudaba a realizar su trabajo con los árboles y que además facilitaba el transporte para las consultas médicas del hospital de Asuntos de Veteranos. Hoy, recibió una Chevy Colorado para reemplazar la camioneta que destruyó la tormenta.
“Las consultas terapéuticas me ayudaron a sanar lo que viví durante la guerra, y me ayudaron a enfrentar lo que experimentamos durante la tormenta”, dijo el residente de Spruce Pine, Carolina del Norte, relatando cómo las explosiones y la madera astillada durante la tormenta le trajeron recuerdos del combate en el extranjero. “Esta camioneta es una verdadera bendición para mí”.
Franklin Graham ora con uno de los once beneficiarios de nuestro programa de reemplazo de vehículos.
A cada familia que recibió un vehículo nuevo también le hemos obsequiado una Biblia especial del Billy Graham Training Center firmada por el personal de Samaritan’s Purse que sirvió en esa zona. Además, un miembro del personal de Samaritan’s Purse compartió el Evangelio de Jesucristo con cada beneficiario.
“Así como usted tuvo fe de que hoy recibiría un vehículo si venía aquí, Dios le extiende el regalo de la salvación”, dijo John Musick. “Tiene que recibirla por fe”.
Franklin Graham y otros miembros del personal de Samaritan’s Purse tuvieron un encuentro con los propietarios en la Alliance Bible Fellowship, en Boone, Carolina del Norte, para dedicar los autos y las camionetas nuevos que reemplazan a los que fueron dañados por la tormenta.
