Operation Christmas Child alcanza a los niños y a los padres desplazados por la guerra.
Millones de niños han huido al oeste de Ucrania o han dejado el país desde que la guerra comenzó en febrero del año pasado. Cada uno tiene su propia historia de confusión, miedo y trauma.
Las iglesias en Ucrania tratan de satisfacer las necesidades prácticas de los desplazados de muchas maneras, como al proveer refugio y comida. Samaritan’s Purse ha provisto más de 130 millones de libras de comida en más de un año. Además, muchas congregaciones siguen colaborando con Operation Christmas Child, un proyecto de Samaritan’s Purse, que trae gran gozo y las Buenas Nuevas del Señor Jesucristo a los niños en necesidad.
Las iglesias en Ucrania alcanzan a los niños y los padres desplazados por la guerra.
Miles de iglesias en toda Ucrania han distribuido 400 000 cajas de regalos este año, cada una llena con una variedad de regalos que incluyen típicamente ropa, juguetes, útiles escolares, artículos de higiene y otras cosas divertidas. En los eventos evangelísticos, los niños reciben sus cajas de regalos y escuchan una presentación del Evangelio de acuerdo a su edad y en su idioma. También se los invita a un curso de seguimiento llamado La Gran Aventura.
Muchos padres han encontrado refugio para sus pequeños en la ciudad occidental de Lviv. La iglesia del pastor Fedir* es una de las muchas que están ayudando a las familias con ayuda física y espiritual.
Servir a Cristo cuando tu país está en guerra no es fácil y requieres flexibilidad para ayudar cuando se necesita. Cuando el pastor despertó en febrero 2022 con las noticias de los primeros ataques, supo que su vida tendría dos períodos: antes y después de la guerra. “Ese día supe que mis planes se cancelarían”, dijo. “Debía hacer lo necesario en esta situación”.
El pastor Fedir (en la chaqueta marrón) está junto al equipo que realizó los eventos evangelísticos este invierno.
El pastor Fedir ha expandido su ministerio para niños y jóvenes para incorporar a los niños desplazados. “Tratan de ocultar sus emociones”, dijo el pastor al referirse a los niños, “pero podemos ver, de vez en cuando, que sus almas están heridas”. Aunque la guerra ha traído desafíos, su objetivo sigue siendo el mismo: “Lo más importante es ver que los niños reciban a Jesús como Salvador”.
Los niños desplazados encuentran gozo en Lviv
La iglesia del pastor Fedir dirigió dos eventos evangelísticos de Operation Christmas Child a los niños desplazados a principios de este año. Ya que los padres desplazados que huyen de la guerra tratan de encontrar trabajo y un techo y comida, no se enfocan en los niños tanto como quisieran, dijo el pastor. Y los niños extrañan lo que han dejado atrás: sus hogares, sus amigos, sus juguetes. Así que, los regalos de Operation Christmas Child son “un faro de luz brillante pues tienen sus propios juguetes, su propia caja”.
Daryna y su hermana Kalyna (derecha) se gozan por sus cajas de regalos.
Ambos eventos alcanzaron a docenas de niños y contaron con juegos, canciones animadas y una presentación del Evangelio desde la creación hasta la resurrección. Se dio una invitación a los adultos y a los niños para que creyeran en el Señor Jesucristo (Romanos 10:9).
Muchas personas en ambos eventos han huido de la guerra en el este de Ucrania: las familias vienen de las regiones de Kharkiv, Donetsk y Zaporizhzhia, entre otras.
Dmitro* y su esposa Alina* huyeron de Kharkiv con sus dos niñas al principio de la guerra, y pasaron cinco días en un refugio antibombas en el centro de Ucrania. “Salimos de Kharkiv por las niñas”, dijo Dmitro. Kharkiv, la segunda ciudad más grande de Ucrania, estuvo bajo ataque de las fuerzas rusas durante semanas.
En marzo 2022, Alina y las niñas viajaron a Eslovaquia, mientras Dmitro se instalaba en Lviv. En septiembre del año pasado, la familia se reunión en el oeste de Ucrania.
La familia completa vino a la iglesia del pastor Fedir una noche fría de invierno. “Agradecemos tanto que ellos (la iglesia) están pensando en los niños durante este tiempo”, dijo Dmitro.
Alina (derecha) disfruta mirar los regalos que sus hijas recibieron de Operation Christmas Child.
Daryna*, de siete, y Kalyna, de 9, se alegraron con sus cajas de regalos. Daryna sostuvo su gato gris de peluche con gozo y Kalyna atesoró su rana de peluche. “Están felices con tantos regalos”, dijo Alina.
Dmitro vio que su familia no tenía interés en la religión antes de venir a Lviv. Pero ahora ven que el pastor Fedir acoge a los niños y a sus familias. La pareja decidió incluso que sus hijas participaran en las clases de discipulado. “Nos dijeron que habría clases para niños y queremos que vengan”, dijo Alina.
Más cajas traen más oportunidades
Unos días después, Kateryna* de 13, recibió una caja de regalos con una cuerda para saltar, una pelota, una botella de agua, productos de higiene, crayones y más. Kateryna, cantante y pianista, quiere volver a su ciudad en Kharkiv donde se destruyó su hogar por una bomba. Aunque extraña a amigos y familiares, su mamá dijo que sólo regresarían cuando “pasaran estas cosas terribles”.
En el mismo evento, Anastasia*, 7, e Ionna*, 5, de la región de Donetsk también recibieron cajas. Compartieron muñecas, peines y los otros juguetes. Su mamá, Vira*, estaba feliz porque Anastasia pudo disfrutar su cumpleaños de una manera especial.
Vira sonríe con sus hijas Anastasia (derecha) e Ionna después de recibir las cajas.
La familia huyó del este de Ucrania en un tren de evacuación después de un ataque en su área. Se alegraron por irse, pero la experiencia las asustó. “El tren tenía mucha gente, como sardinas en una lata”, dijo Vira.
Ahora viven en un pueblo modular de Lviv que acomoda a personas desplazadas por la guerra. “Es difícil”, dijo Vira. “Debemos quedarnos aquí. Es el único lugar. No sabemos lo que depare el futuro. Quizá termine la guerra”. Cada día, Anastasia pregunta a Vira cuándo pueden volver a casa, pero ¿qué puede responder un padre ante dichas circunstancias?
Maria* y su hija Feya* de 9 son de la región de Zaporizhzhia y ahora viven en la misma comunidad que Vira y sus hijas. Feya recibió una diadema, una muñeca, un gorro, unos guantes y muchas cosas más. “Esto es importante para mí porque ella está feliz”, dijo María. “Cuando los niños están felices, los papás también”.
La iglesia del pastor Fedir está llena durante este evento evangelístico.
Maria agradece por el apoyo que ha recibido de la iglesia del pastor Fedir. “Nos emociona la iglesia porque nos ayuda mucho”, dijo.
Samaritan’s Purse agradece a las iglesias colaboradoras en Ucrania. Las personas están viendo a los cristianos en acción, cuidando el bienestar físico y espiritual de adultos y niños.
“Las vidas de todos han sido sacudidas, en el este y el oeste de Ucrania”, dijo Halya*, una representante local de Operation Christmas Child. “La guerra ha traído un anhelo por oír la Palabra de Dios para encontrar paz. Los corazones de las personas se han suavizado”.
Luego dijo: “Es ahora el tiempo. Son los últimos días. Debemos compartir el Evangelio y tener el celo para predicarlo tan pronto como podamos y usar cada oportunidad que tengamos”.
Por favor, ora que Dios dé a los líderes cristianos sabiduría y visión para saber cómo ministrar a los niños durante y después de la guerra.
Para más información sobre la ayuda de Samaritan’s Purse en Ucrania, lee nuestras actualizaciones aquí..
Por favor, ora por los niños en Ucrania que deben enfrentar los cambios y problemas relacionados con la guerra.
*Los nombres se han cambiado por motivos de seguridad.
