Una semana de cirugías por el equipo de Samaritan’s Purse en Tonj ayudó a cambiar vidas, tanto ahora como para la eternidad.
La cirugía de cataratas, un procedimiento simple en países occidentales, es casi imposible en Sudán del Sur. Cuando las personas notan que sus ojos empiezan a nublarse con cataratas solo es cuestión de tiempo antes de quedar completamente ciegos.
Para ayudar con las grandes necesidades de esta nación del este de África, Samaritan’s Purse envió a un equipo médico a Tonj, Sudán del Sur, para conducir una misión de una semana. Cientos de mujeres y hombres respondieron, muchos caminando hasta cinco días para llegar al hospital Deed and Truth, nuestro colaborador.
Awein Bak, una mujer frágil de 90 años, fue una de los pacientes. Empezó a perder su visión hace cinco años. En los últimos tres ha vivido en completa oscuridad. Awein no era suficientemente fuerte para viajar la distancia al hospital y su familia no tenía el dinero para rentar un auto o una moto. La situación era triste. Desesperadamente quería ver otra vez, pero llegar a la clínica parecía casi imposible.
Entonces sus cuatro nietos se juntaron. La acompañaron en el viaje, tomando turnos para cargarla en sus espaldas por el camino polvoriento. Durante cuatro días, avanzaron por el camino así, comprometidos a dar a su abuela una oportunidad más de verlos a los ojos otra vez.
Awein recibió la cirugía de cataratas a través de Samaritan’s Purse y en menos de 24 horas, removieron su parche y se gozó por su nueva visión.
“La oscuridad se alejó y solo puedo ver la luz. Estoy tan feliz”, dijo Awein.
Awein se llenó de gozo mientras veía a sus nietos de nuevo por primera vez después de años. Dijo: “Dios ha sido fiel conmigo. Su amor y Su misericordia son hermosas sobre mí”.
Esperando ver otra vez
El año pasado, Samaritan’s Purse también condujo una semana de cirugías de cataratas en la remota Tonj. Las necesidades eran abrumadoras pues cientos de pacientes ciegos esperaban ver otra vez.
Bath Madhieu esperó para ser uno de esos pacientes. Bath vivía en una aldea a más de cinco días a pie. Cuando recibió la noticia de que Samaritan’s Purse ofrecía cirugías de cataratas, comenzó a correr. La clínica ya estaba en marcha, pero estaba dispuesta a hacer lo que fuera por la oportunidad de ver otra vez.
Viajó a pie lo más que pudo, guiada por su hija. pero la distancia era mucha. Cuando llegó a la aldea, la semana de la clínica había terminado. Pero Bath no se rindió.
En lugar de volver a su aldea, Bath y su hija decidieron quedarse en Tonj. Entonces supo que Samaritan’s Purse regresaría este año (2022), y se preocupó que su hogar estaba demasiado lejos para regresar a tiempo. Bath no podía arriesgarse a no enterarse de las fechas otra vez. Bath no podía perder la oportunidad de no ver otra vez. Después de un año de esperar, orar y anhelar, el equipo de Samaritan’s Purse regresó a Tonj en octubre. Bath fue una de sus primeras pacientes.
“Estaba esperando pacientemente”, dijo. “Porque estaba esperando con fe que vería otra vez”.
Ser ciego en Sudán del Sur es muy debilitante. Los recursos básicos como el agua y el alimento requieren gran esfuerzo. Casi todos deben sembrar y cultivar su propia comida, y nadie tiene agua corriente dentro de sus casas. El regalo de la vista cambia completamente las vidas de las personas.
Bath recibió el regalo este año. Empezó a cantar y bailar cuando removieron su parche.
“Era ciega y ahora veo, sencillamente porque la gente de Jesús vino con el amor de Jesús y abrió mis ojos”, dijo Bath.
La vista de Bath se restauró, pero más importante, sus ojos espirituales se abrieron. Durante el proceso de recuperación, escuchó el Evangelio. Por primera vez, las palabras de Dios convencieron su corazón. Hizo la decisión de aceptar a Jesucristo como su Salvador. Mientras se preparaba para el viaje de cinco días a casa después de un año de estar fuera, prometió que compartiría su testimonio con quien se encontrara. Dijo que si la comunidad no le cree, les dirá: “No me tienen que creer. Si necesitan prueba, la prueba es que ahora veo. Voy a servir a Jesús”.
Del 7 al 13 de octubre 2022, el equipo de Samaritan’s Purse realizó 442 cirugías de cataratas. Alabamos a Dios que muchos pacientes no solo recibieron vista física sino también espiritual.
Por favor continúa orando por nuestros equipos de cirugía y a quienes sirven.
Nota: Si eres un especialista médico con interés en servir en un equipo quirúrgico, conoce más de nuestro programa de cataratas..