Un hombre ucraniano al que ayudó Samaritan’s Purse a recuperarse lentamente después del colapso del dique Kherson, recibe ánimo de un auto con marcas de balas y una nueva Biblia.
Los libros llenaban la casa de Vasyl* en la región de Kherson en Ucrania. Su colección incluía casi 3000 títulos que atesoraba. Cada uno contaba una historia y ampliaba su conocimiento del mundo.
Cuando el dique Kakhoka colapsó a principios de junio, perdió toda su biblioteca. Las aguas se elevaron más de un metro y destruyeron sus preciados volúmenes y muchas de sus pertenencias personales. La constante inundación también arruinó sus muebles y sus premios de sus días como un boxeador profesional y soldado.
Se rompió el corazón de Vasyl ante tanta devastación.
Inicio a la recuperación
Cuando Samaritan’s Purse llegó para ayudar a salvar su casa, nuestros equipos sacaron el agua y el lodo fuera para evitar que los elementos provocaran más daños. Sin embargo, a pesar de todo este trabajo, todo estaba tan húmedo que Vasyl sacó 16 cubetas más de agua de su deshumidificador.
Dispuesto a ayudar con el proceso de recuperación, Vasyl aplicó barro a las paredes de su hogar para acelerar las reparaciones. Quería un poco de orden en lugar de desorden. El modo en que la inundación afectó su casa solo indicaba cómo se sentía su corazón.
“Estoy firmemente convencido que Dios salvó mi vida para un mayor propósito”.
Vasyl, el veterano, traía cicatrices físicas y emocionales de su tiempo en Afganistán. Sin embargo, tiempo después de volver a Ucrania y empezar la sanidad, Vasyl, el esposo, perdió trágicamente a su esposa. Esto sucedió tres años atrás y su corazón todavía se duele.
Por si no fuera poco, Vasyl, el padre, enfrentó otro golpe cuando su hija tuvo que marcharse en busca de cuidado médico urgente. Se quedó solo en casa con sus libros, hasta que vino el colapso y el agua se llevó lo poco que le traía consuelo.
Confirmaciones de la presencia y la protección de Dios
Rodeado por los restos de su vida pasada, como un sofá mojado y un poco de ropa, así como un tipo de cama en el pasillo, Vasyl trata de sostenerse a la esperanza y reconstruir su hogar. En la esquina hay una caja que recibió de Samaritan’s Purse que le recuerda que Dios no lo ha olvidado.
En ocasiones hojea algunos de los cien libros que rescató de la inundación. Con tan poco en su colección, ha comenzado a depender más de otro texto: la Biblia que le dio Samaritan’s Purse. Lee con frecuencia sus páginas y en especial disfruta los Evangelios que repasa una y otra vez en busca de respuestas a las muchas preguntas que pesan en su corazón.
Afuera, el patio de Vasyl tiene un auto antiguo que le anima. Aunque de casi 40 años, este LuAZ, un automóvil ucraniano construido durante la Unión Soviética es una de sus posesiones favoritas.
“Reparo todo con mis propias manos”, djo Vasyl.
Pero más que un sentimiento de logro, el auto le recuerda de la fidelidad de Dios para con él.
Una mirada cuidadosa muestra una bala en el costado, cerca del asiento del conductor. En otro lado, hay agujeros de bala que atravesaron el vehículo. Vasyl no sabe cuándo esto sucedió.
“Venía por la carretera y no me di cuenta de que me estaban baleando”, dijo. “Estoy firmemente convencido que Dios salvó mi vida para un mayor propósito”.
Hoy, estos orificios de bala y la Palabra de Dios ayudan a Vasyl a recordar el poder del Señor y su presencia incluso cuando todo parece desmoronarse.
Oraciones por el pueblo en Ucrania
Por favor, ora por Vasyl y otros en la región de Kherson que se aferran a la promesa: “Entonces ustedes me invocarán, vendrán a suplicarme y yo los escucharé. Me buscarán y me encontrarán cuando me busquen de todo corazón” (Jeremías 29:13-14).
Desde principios de junio, Samaritan’s Purse ha restaurado más de 1000 casas que se dañaron con la inundación. Además, hemos provisto 24 000 comidas calientes y más de 181 000 galones de agua. Actualmente instalamos 10 sistemas de agua potable para ayudar a la gente de Kherson a recuperarse y reconstruir.
En toda Ucrania hemos repartido cerca de 300 000 Biblias desde el inicio de la guerra.
*Nombre cambiado por seguridad