Un ministro colaborador en Gambia inició el curso de discipulado "La Gran Aventura" únicamente con su hijo, pero creció en número su clase hasta alcanzar 21 participantes, ¡quienes compartieron a Jesús con amigos y familiares!
Johnjames dejó su hogar en Nigeria para servir como misionero en Gambia, una nación cerca de África Occidental, en enero 2020. Él se llevó consigo a su hijo de 5 años, Unique, mientras que su esposa y recién nacido planeaban llegar unos meses después. Pero debido a la pandemia global, los planes de viaje se frustraron. Sin desanimarse, Johnjames y Unique continuaron su misión.
Durante el año, padre e hijo caminaron por las calles de Banjul, Gambia, compartiendo el Evangelio. Las cajas de regalos de Operation Christmas Child y la guitarra de Johnjames ayudaron a compartir el amor de Dios por medio de regalos y canciones.
El dúo distribuyó 75 cajas de regalos a niños entre 2 a 14 años -¡hasta Unique se sorprendió de recibir una caja para él!-. Ellos entonces invitaron a todos los niños que recibieron una caja a que regresaran a participar en el programa de discipulado "La Gran Aventura". Tristemente, debido a sus obligaciones escolares y al temor del COVID-19, ninguno de ellos regresó.
Iniciando con fe
"Después de una semana, Unique insistió que 'La Gran Aventura' debería iniciar con él", dijo Johnjames. Él estaba renuente a lanzar la clase solo para su hijo, pero confiando que otros se le unieran después, empezó la clase con fe.
La primer lección de Dios como el Creador les tomó desde lunes a viernes para completarla. Al siguiente día, Unique fue a jugar con el balón de futbol que recibió en su caja. Dos niños, Mendy y Musa, se unieron a él y empezaron a hablar sobre su nuevo balón. Unique les contó sobre la caja de regalos y las lecciones de "La Gran Aventura", invitando a sus amigos a estudiar la Palabra de Dios con él. ¡Emocionado, llevó a sus nuevos amigos a la casa y le preguntó a Johnjames si ellos podrían obtener cajas de regalos también!
Johnjames ya había repartido todas las cajas de regalos que tenía, por lo que contactó al pastor local, nuestro coordinador regional de Operation Christmas Child, para ver si podía obtener más para los nuevos amigos de Unique.
El pastor no estaba seguro de poder distribuir más, pero al final, él lo hizo, dándole a Johnjames la oportunidad de alcanzar a todo un nuevo grupo de niños, incluyendo a Mendy y Musa.
La clase se multiplica
Dos días más tarde, el par de amigos se unió a las clases de "La Gran Aventura", ahora ya eran tres el total de participantes.
La segunda vez que el trío se reunió para una clase, Mendy mencionó que sus hermanas pequeñas querían venir. Johnjames y los niños consultaron con los padres y con su aprobación, las hermanas se unieron, convirtiendo la clase en seis.
Musa también llevó tres de sus amigos, por lo que la clase continuaba creciendo, ya que los niños y niñas les contaban a sus amigos sobre Jesús.
Con el número en crecimiento y la necesidad de seguir las restricciones del COVID-19 para cualquier grupo, se dividieron en dos clases, en dos diferentes lugares y así darle a los niños fácil acceso a las lecciones. Cada lunes, miércoles y viernes, Johnjames eran el anfitrión de las clases por las mañanas, antes de que él y Unique caminaran al siguiente local para las clases de las tardes. Esto continuó hasta que los niños y niñas completaran todas las 12 lecciones del curso.
"Siete niños recibieron a Cristo como Señor", dijo Johnjames. "Los padres estaban contentos por lo que sus niños estaban aprendiendo por medio de 'La Gran Aventura' y por los cambios comportamiento positivos que estaban observando. De solo un niño, llegamos a tener 21 que estaban asistiendo a las clases consistentemente hasta la graduación".
De solo un niño, llegamos a tener 21 que estaban asistiendo a las clases consistentemente hasta la graduación
Enseñando todas las historias de la Biblia
La graduación del programa no sucedió de forma inmediata debido a los encierros del país. Mientras tanto, durante un tiempo de devocional matutino, Unique le preguntó a su papá: "¿Solo hay 12 historias en la Biblia?".
Johnjames le contestó inmediatamente que no.
"Llamémoslos a todos entonces, para que puedas enseñarles todas las historias", dijo Unique.
Johnjames se rió de la sugerencia, pero pronto se dio cuenta que su hijo estaba hablando en serio.
No mucho tiempo después, la mamá de Mendy agradeció a Johnjames por las cajas de regalos y por el curso de discipulado "La Gran Aventura". Ella también le sugirió que continuara enseñándole a los niños "porque las clases están realmente mejorando sus vidas y manteniéndolos ocupados, especialmente ahora que han estado fuera de la escuela por meses".
Johnjames estaba sorprendido de las repetidas sugerencias y le mencionó a ella que Unique también se lo había mencionado.
Hoy en día, el realiza un club de Biblia, con el nombre en honor a su hijo, que se reúnen cada sábado por dos horas.
"La meta del "Club de Biblia Unique" es ayudar a los niños a aumentar su conocimiento de las Escrituras y moverlos a una pasión para amar, conocer y servir a Dios de todo corazón", dijo Johnjames.
"La meta del club es ayudar a los niños a aumentar su conocimiento de las Escrituras y moverlos a una pasión para amar, conocer y servir a Dios de todo corazón".
Estas clases conllevan a revisar las clases de "La Gran Aventura" y estudiarlas con profundidad. Además, ellos memorizan las Escrituras, crecen en oración, cantan y actúan las historias de la Biblia, además de alcanzar a otros con el Evangelio de Jesucristo. Debido a que la pandemia global ha mantenido a los niños sin ir a la escuela, los participantes están también aprendiendo a leer, escribir y hablar en inglés.
"Gracias, Operation Christmas Child, por la gran oportunidad de alcanzar a nuestros niños", dijo Johnjames. "Mi participación con el proyecto de Samaritan's Purse ha motivado mi ministerio en Gambia. Me ha permitido alcanzar a niños y sus familias y compartir el Evangelio".