A través de los programas de nutrición para madres, infantes y niños, las comunidades en Sudán del Sur son más fuertes y saludables.
Hasta hace poco, las enfermedades eran parte de la vida en las aldeas remotas en el condado de Mayendit en Sudán del Sur. Las enfermedades por agua contaminada, mala nutrición e infecciones arrasaban con madres y niños.
Los talleres de capacitación proveen oportunidades para orar y compartir de la Palabra de Dios.
Esto era verdad hasta que mujeres como Nydech, una madre de site, participó en el programa de nutrición (MIYCN) que proveyó Samaritan’s Purse. Sus líderes comunitarios la eligieron para que dirigiera el programa y Nydech recibió capacitación importante que ha podido compartir con otras madres en su comunidad y más allá.
Disipar malos entendidos y mitos para salvar vidas y hacer comunidad
Nydech aprendió prácticas diarias que impiden la propagación de enfermedades entre madres e hijos, como el lavado de manos.
Los padres aprenden sobre nutrición e higiene.
“Pensábamos que el jabón solo se usaba en la ropa”, dijo. “Durante esta capacitación descubrió que también se usa para limpiar las manos, lo que mejora la salud y la higiene de las familias”.
Los ajustes sencillos en nutrición y lactancia han impactado profundamente la salud de los niños también.
Durante muchas generaciones, las mujeres pensaron que la “leche amarilla” que producían los primeros días de lactancia dañaba al recién nacido. Pero ahora los alimentan con el calostro, rico en nutrientes y fortalecedor de inmunidad, tan vital en los niños en sus primeros días.
Antes, dijo Nydech, había mucha enfermedad entre niños y bebés porque las madres los alimentaban con agua y leche de vaca en lugar de la leche materna. Ahora, capacita a las mujeres a lavarse las manos, comer cosas buenas y practicar buena lactancia, así que los números de enfermos han disminuido.
Llevarán este conocimiento y lo enseñarán en sus comunidades.
Más madres en Mayendit buscan consejo médico e intervención en sus embarazos, como resultado, hay menos complicaciones en las aldeas.
Nydech ha enfatizado la importancia de chequeos médicos para embarazadas, y anima a a las mujeres a ir a las clínicas o centros de parto cuando dan a luz. Al involucrar a los profesionistas, se han salvado muchas vidas, de madres y niños.
Madres enseñan a madres
Mientras este conocimiento se pasa a través de los grupos de cuidado del MIYCN, se detiene la herencia de problemas de salud prevenibles que Mayendit ha sufrido durante generaciones.
Hasta ahora, 110 grupos de cuidado, cada uno con siete o doce miembros, se han establecido en Mayendit, y poco a poco la calidad de vida ha mejorado en la región. Nydech dice que las familias que supervisa están más saludables que nunca.
“Nuestros niños ya no tiene diarera, y están saludables por todo lo que han aprendido de las capacitaciones sobre lactancia”, dijo Nydech. “Las madres también están con buena salud y no se enferman durante el embarazo. Hemos aprendido a ir a las instalaciones médicas y no quedarnos en casa. Hemos aprendido mucho de Samaritan’s Purse y lo seguiremos haciendo”.
