En tanto los norteamericanos celebran la libertad el Día de la Independencia, las parejas experimentan libertad en sus vidas y matrimonios en Alaska a través de la esperanza que solo se encuentra en el Evangelio de Jesucristo.
El miércoles 19 de junio de 2024 es un día que Ruth Szymansky no olvidará jamás.
Unos días antes, Ruth y su esposo Matt, un sargento principal de la Artillería Marina ya retirado, llegaron a Samaritan Lodge Alaska para la semana 4 de la temporada de verano de Operation Heal Our Patriots.
Ruth se inscribió al programa al encontrarlo por casualidad en Facebook. Hizo un poco de investigación en línea y le gustó que el programa se basara en Cristo, aunque no era cristiana y Matt había abandonado la iglesia décadas atrás.
“Supe que me recibirían bien”, dijo Ruth. “No siempre me siento así. Supe que la gente sería abierta y encontraría un lugar al que pertenecer”.
Matt sirvió en la Marina durante 26 años, de 1988-2014. Se desplegó varias veces, entre ellas a Irak. Sufre de síndrome post-traumático y recibió una herida seria cuando un bombardero suicida explotó cerca de él. Los problemas respiratorios lo atormentaron por meses debido a respirar humo tóxico que provino de un pozo de quema masivo en Irak.
“Estaba muy mal cuando me fui”, dijo Matt. “Bebía mucho alcohol entonces. Apenas en diciembre salí de rehabilitación. Dejé el hábito, y ahora pienso con mayor claridad”.
Pero los problemas en el matrimonio de Matt y Ruth persistían. Para colmo, Matt se aislaba de todos.
“No sabíamos cómo comunicarnos”, dijo Ruth. “Nuestra comunicación consistía en que yo azotara la puerta y él se durmiera en el sillón. Eso era todo. No hablábamos de nada. Nunca”.
Cuando Matt supo que iban a Alaska, pensó que sería divertido pescar y ver osos, y hacer otras cosas divertidas. Pensó que las clases de enriquecimiento matrimonial serían “el precio a pagar para divertirse”, dijo. “Pero cuando llegué, mi actitud cambió de inmediato. Necesitaba esas clases. Todo lo demás era extra”.
Sentir la presencia de Dios
A través de las clases y el tiempo en consejería con nuestros capellanes, Matt y Ruth aprendieron a comunicarse mejor y resolver conflictos de una manera saludable. Ruth también empezó a sentir la presencia de Dios.
“Pensé más en el Señor desde que llegué al campamento”, dijo ella. “Al ver cómo el personal se dice hermano y hermana fue importante. Me encantó la camaradería y supe que eran hijos de Dios”.
Pero Ruth no pensó que pudiera tener una relación personal con Cristo. Creció con un padrastro ateo que no le permitió ir a la iglesia. “Así que, acepté el hecho de que no conocería al Señor porque así era la vida”. En cuanto a Matt, él creció en la iglesia “desde que se abrían las puertas”, dijo. “Pero cuando me fui de casa y al ejército, dejé de ir. Me habían obligado. No fui durante mucho tiempo”.
“Es un día que jamás olvidaré”
Entonces, el miércoles 19 de junio, Matt y Ruth acompañaron a otras parejas en el barco de pesca de Operation Heal Our Patriots, Jay Hammond, al lago Clark. El barco se detuvo en la playa White Sands. Mientras algunos pescaban y exploraban el área, Dana, una de las guías, le preguntó a Ruth si conocía al Señor. Ruth dijo que no, pero que le gustaría. Un capellán compartió el Evangelio con Ruth y ella aceptó a Jesucristo como Señor y Salvador.
“Estaba lista”, dijo Ruth. “Lo había pensado durante mucho tiempo. Era el momento correcto”.
Al ver que Ruth venía a Cristo, el corazón de Matt despertó de una fe adormecida. “Ahora quiero que encontremos una iglesia”, dijo.
Más tarde, esa noche, Matt y Ruth supieron que su quinto nieto había nacido. Ruth y su nieta ahora comparten un cumpleaños, uno físico y uno espiritual. “Es un día que jamás olvidaré”.
Un nuevo capítulo
El viernes, un poco antes de dejar Samaritan’s Lodge Alaska, Matt y Ruth renovaron sus votos matrimoniales y entregaron su matrimonio a Cristo.
“Vamos a casa para comenzar un nuevo capítulo en nuestras vidas”, dijo Ruth. “Las cosas serán ahora diferentes porque tenemos nuevas herramientas”.
También dijeron que animarán a otras parejas militares con problemas para inscribirse a Operation Heal Our Patriots.
“Lo recomendaremos porque cambió nuestras vidas”, dijo Ruth. “Ha hecho una gran diferencia en cómo pensamos el uno del otro y cómo nos hablamos, y es donde encontré a Dios. Ha sido una experiencia transformadora”.
Por favor, ora por las más de 180 parejas que vendrán a Operation Heal Our Patriots este verano en Alaska para una aventura única en la naturaleza y con capacitación bíblica sobre matrimonios.