sirviendo en el nombre de Jesús, junto a las iglesia locales, Samaritan's Purse tiene ya tres centros de trabajo operando para ayudar a los afectados del huracán Ida.
Edward Graham viajó a ver el trabajo de Samaritan's Purse en Louisiana este pasado Día del Trabajador, motivando a su paso a las familias que limpiaban después del huracán Ida y asegurándoles que nuestro personal y voluntarios están ahí para ayudarlos en el nombre de Jesús.
Edward Graham realiza una visita a la casa de su dueño Bradley Giroir, en Houma.
"Esto es lo que los voluntarios de Samaritan's Purse hacen en todo el mundo, cuando ocurre un desastre, vamos con amor a nuestro prójimo", dijo Graham, quien sirve como asistente del vicepresidente.
Samaritan's Purse rápidamente se movilizó hasta Louisiana después que el huracán Ida de categoría 4 golpeó la zona y ya tiene tres centros de trabajo operando en tres ciudades del sureste del estado (Houma, Hammond en la costa norte y Greater New Orleans).
"Esta comunidad está devastada", dijo Graham con respecto a Houma. "Esta área recibió fuertes vientos dañinos y cada uno de los techos que he visto está destruido. También van a estar sin electricidad por varias semanas".
Ayudando a familias a levantarse de nuevo
Entre las personas que Edward Graham conoció se encuentra Bradley Giroir.
Bradley, su esposa Alisha y sus seis hijos, evacuaron hacia el noreste de Louisiana, mientras las fuerzas de las ráfagas de Ida rugían por encima de los 100 mph. A su regreso a casa, la tormenta devastó su vecindario, derribando varios árboles grandes sobre su propiedad.
Nuestros equipos están trabajando en tres estaciones a lo largo del sureste de Louisiana.
"Me estaba empezando a poner ansioso de todo lo que teníamos que hacer adentro, de regresar con nuestra familia y de convertir este lugar en uno seguro para nosotros", dijo Bradley.
Pero Dios ya estaba trabajando. Los voluntarios de Samaritan's Purse, del centro de trabajo con base en la iglesia Covenant Church en Houma, llegaron a la casa de Bradley equipados con motosierras, carretillas, rastrillos y otras herramientas necesarias para remover los árboles caídos.
"Me sentía abrumado del gozo de saber que no tuve que buscar a nadie más para que viniera a mi casa y me ayudara con esto. Dios ya tenía las cosas puestas en su lugar antes de que nosotros lo supiéramos", dijo Bradley.
Nuestros voluntarios proveen mucha asistencia necesaria. "Aún en tiempos de crisis y en la tormenta, Samaritan's Purse viene a a ayudar en el nombre de Jesucristo, porque Él te ama", le dijo Edward a Bradley.
Huracán y problemas de salud crean situaciones difíciles
Fue una motivación que llegó justo a tiempo, ya que la familia de Bradley enfrentan la situación permanente de las necesidades de salud de su hijo Holden de 7 años. Los problemas de su hijo aunados a las consecuencias del huracán, tenían a Bradley sumamente agobiado. "No podía ni pensar claramente", dijo él.
Edward Graham y el Dr. Richard Furman, cofundador de World Medical Mission, comparten tiempo en oración con Bradley.
Holden nació con un defecto en el corazón y una condición genética. Ha sufrido complicaciones de salud frecuentemente y varias cirugías, incluyendo dos de corazón abierto, durante los primeros 15 meses de edad. Hace tres años, la familia enfrentó otro reto cuando Holden fue diagnosticado con cáncer después de una visita del doctor de rutina. Aún, confiando en los planes y propósitos de Dios, de nuevo trajo paz más allá del entendimiento para los Giroir.
Alabado sea Dios que Holden fue declarado libre de cáncer después de meses de recibir terapia, tratamiento y cirugías. "No hay duda de que la oración y un equipo valiente de doctores y cirujanos ayudaron a este pequeño niño a vencer el cáncer, él es un milagro", dijo Bradley.
La salud de Holden fue el factor principal en la decisión de la familia de evacuar mientras el huracán Ida arremetía en la costa. Él necesita estar cerca de una institución médica todo el tiempo y con los hospitales perdiendo la electricidad y saturados por los pacientes del COVID-19, permanecer al sureste de Louisiana no era una opción.
La oraciones fueron contestadas una vez más
En los días siguientes a la tormenta, Holden desarrolló una reacción alérgica a una de las medicinas y tuvo que ser hospitalizado. Bradley y Alisha, quienes estaban al norte con los niños, se vieron forzados a balancear el cuidado de su hijo y el de la casa, la cual estaba devastada por el huracán.
Necesitamos más voluntarios que vengan y sirvan en el nombre de Jesús en este Estado de Bayou.
Una vez más, la pareja buscó a Dios en medio de la tormenta.
"Cuando no tienes electricidad, has perdido todo en tu casa, no puedes encontrar los recursos que normalmente usarías, pero el poder de la oración es increíble", dijo Bradley. "Si solo unes tus manos y rodillas en oración a Dios, Él caminará junto a ti a través de lo que sea que estés atravesando. Él te recordará que tiene el control y no necesitas preocuparte".
Bradley agradece a Dios por contestar sus oraciones a través de los voluntarios de Samaritan's Purse.
"Lo que ustedes han hecho por mí hoy es una enorme bendición", dijo Bradley. "Mi oración por todos ustedes es que Dios los bendiga de la misma forma en que ustedes me han bendecido. Estoy confiado de que mi familia ahora está ahora en un lugar seguro y que Holden puede recibir los cuidados que necesita".
Edward Graham testificó de la provisión del Señor en su propia vida y dejó a los Giroir con unas palabras que calzaron muy bien de Hebreos 13:5 "Nunca te dejaré, jamás te abandonaré" (NVI).
"En mis 16 años de combate con operaciones especiales y en las tormentas de la vida, siempre he sabido en toda mi existencia, que Dios estaba ahí", dijo Edward. "Él nunca me dejó".
Por favor ora por la familia de Giroir y todos los que están sufriendo en recuperarse después del huracán Ida. Por favor continúa orando por nuestros equipos que están trabajando en Louisiana. Para más información sobre cómo puedes servir con nosotros para ayudar en el nombre de Jesús, visita: SPVolunteer.org.
Voluntarios de Samaritan's Purse oran con Bradley, después de entregarle una Biblia con las firmas de cada uno de los que trabajaron en su casa. Por favor continúa orando por las familias como la de Bradley, quienes están sufriendo por las consecuencias del huracán Ida. Ora también por nuestros voluntarios, quienes continúan compartiendo el amor de Dios, durante estos tiempos difíciles.
