Dios continúa transformando vidas a través de Operation Heal Our Patriots.
El sargento del Ejército, James Sizemore, y su esposa Krystle ya eran amigos íntimos hace diez años, cuando se casaron. James había salido del Ejército, pero batallaba con el estrés postraumático después de estar en el despliegue militar durante la Operación Libertad Iraquí. Krystle lo animó a buscar ayuda y esto le permitió a James trabajar en su salud mental, de manera que ambos pudieran enfocarse en su relación de pareja.
Krystle, que vivió una infancia difícil, también aportaba su carga emocional a la relación. “Mi mamá siempre fue negativa”, relató. “Me pongo demasiado sensible cuando estoy con personas así. Librarse de esos hábitos y reconocer que los tienes es importante”. James trataba de ayudar a Krystle, pero la ira que ella tenía hacia su madre estaba afectando la relación entre James y Krystle.
Sabiendo que tenían problemas difíciles de enfrentar, se inscribieron en Operation Heal Our Patriots con la esperanza de que el programa mejorara su matrimonio. James dijo: “Nuestra relación empezaba a tener problemas. Vi esto como una manera de salvar lo que teníamos. Nos amamos, pero tenemos algunos problemas que debíamos resolver”.
Durante su semana en Alaska, observaron a osos pardos atrapando salmones en el Parque Nacional y Reserva Katmai, y pescaron tímalos árticos en el Lago Clark. Pero su experiencia en la Última Frontera incluyó algo más que observar la vida silvestre y pescar. A lo largo de la semana, los Sizemore y otras diez parejas asistieron a las clases dadas por los capellanes de Samaritan’s Purse, de los cuales la mayoría ha servido en las fuerzas armadas.
Para James y Krystle, una experiencia que vivieron en el segundo día del programa sacó a relucir algunos problemas matrimoniales. Creían que estaban recibiendo una lección para hacer kayak, pero también aprendieron algo sobre su matrimonio. “Piensas en eso como si solamente estuvieras andando en kayak, pero es mucho más”, dijo James. “Demuestra que tenemos que trabajar en nuestra comunicación porque necesitamos comunicarnos para remar juntos y trabajar en equipo”.
James y Krystle sentían que conocían a Dios y oraban cuando tenían una crisis, pero James explicó que, aunque Dios no había sido excluido de su matrimonio, no era “el foco de atención”. James dijo: “Me consideraba espiritual, pero me había descarriado unas cuantas veces durante mi época en el ejército”.
Durante su semana en Alaska, James y Krystle aceptaron a Jesucristo como su Señor y Salvador. “No había sentido este tipo de paz en años”, dijo James.
Suelta el pasado y deja un legado para el futuro
Una de las sesiones con los capellanes en Alaska se enfocó en cómo el pasado de una persona afecta sus conductas y sus relaciones actuales. “La enseñanza es que, a veces, para dar un paso adelante tienes que dar un paso atrás”, dijo James. “Si es algo que no te agrada, puedes trabajar para cambiarlo”.
Krystle todavía se sentía furiosa con su madre y le costaba mucho perdonarla. Por mucho que quisiera dejar atrás esas emociones, no podía hacerlo sola; ni siquiera con la ayuda de James. Pero, con el poder de Dios, pudo empezar a cambiar. “Algo cambió dentro de mí esta semana, tener esa fuerza a través de Dios para perdonarla y seguir adelante sin importar lo que pase; estoy lista”, dijo Krystle. “Me siento mucho más en paz”.
James y Krystle renovaron sus votos matrimoniales antes de irse de Alaska e hicieron planes de buscar una iglesia para asistir regularmente cuando regresaran a Kentucky. Esperarán para bautizarse cuando su hija pueda estar presente en el evento. “Queríamos reservar nuestro bautismo para ella”, dijo James. “Esperaba que eso motivara a que nuestra hija a quiera hacer lo mismo”.
Encontrar la salvación luego de desacelerarse
La semana de septiembre también ha cambiado la vida del sargento primero del Ejército, Matt Tucker, y su esposa, Kayla. Se casaron jóvenes, pero estaban decididos a formar una relación fuerte.
Kayla dice que la carrera militar de Matt fue importante en la formación de su vida, aunque de una manera distinta a cómo moldeó la de él. La obligó a ser independiente, cosa que no había sido antes de que Matt fuera desplegado a Afganistán, poco después de que se casaron. Dijo: “Nunca había sido realmente independiente; eso me obligó a serlo. Ahora, si algo se rompe, lo arreglo yo. Lo resuelvo”.
Matt siente que su carrera en las fuerzas armadas era exitosa porque confiaba en que Kayla podría ocuparse de todo en casa. “Pero, al mismo tiempo, eso sembró discordia entre nosotros, porque yo estaba demasiado enfocado en el trabajo todo el tiempo”, dijo Matt. “Y ella siempre sentía que no era una prioridad para mí”.
En Alaska, los Tucker aprovecharon la oportunidad para dejar de lado otras cosas y centrarse uno en el otro. Matt dijo: “Lo que más me gusta es que no hay celulares ni cosas por el estilo; nos hace volver a lo esencial. Nos lleva a enfocarnos uno en el otro”.
Kayla estaba tan desacostumbrada a un entorno apacible que la primera noche, después de llegar a la cabaña, caminaba de un lado al otro. “En casa, es un caos”, dijo. “Es correr de un lado a otro, hacer cosas. Por fin estoy empezando a tranquilizarme y a no tener tanta ansiedad. Es increíble”.
Guiados por un capellán que les compartió el Evangelio, en esa semana Matt y Kayla le pidieron a Jesús que fuera el Señor de sus vidas. “Me entregué a Dios”, dice Matt. “Siempre he tratado de descifrarlo, pero no es tan difícil. Le he dado demasiadas vueltas. El capellán pudo explicar las cosas y leyó pasajes que tenían sentido, y me parecieron bien”.
Durante la última mañana que estuvieron en Alaska, Kayla y Matt dedicaron su matrimonio a Dios y fueron bautizados en el Lago Clark.
Los Sizemore y los Tucker son cuatro de las más de 90 personas que aceptaron a Jesucristo a lo largo de las 17 semanas de la temporada veraniega 2023 de Operation Heal Our Patriots en el Samaritan Lodge Alaska, que comenzó el 28 de mayo hasta el 22 de septiembre. Además, alrededor de 30 personas rededicaron su vida al Señor y más de 100 fueron bautizadas. ¡Damos gracias a Dios por lo que Él ha hecho!