Una madre que pasa por momentos difíciles da gracias a Dios por bendecirla con un hijo precioso.
Bernadette estaba preocupada cuando se enteró que estaba embarazada de su quinto hijo. Su familia vive en pobreza en los barrios bajos de Manila, en las Filipinas. Bernadette se preguntaba como iban a proveer para otro niño.
Ella tuvo dudas sobre si debía conservar el bebé y empezó a tomar alcohol pese a que estaba embarazada.
En ese momento, Bernadette recibía beneficios de un programa del gobierno para aliviar la pobreza. Y fue por medio de Samaritan's Purse que Bernadette y otras madres pudieron participar en un proyecto de nutrición en Manila, el cual le enseña a las madres que viven bajo un presupuesto muy limitado, a preparar comidas saludables para sus hijos.
Bernadette también asistió a unas sesiones mensuales de madres de Samaritan's Purse en su comunidad. Cada sesión incluía un estudio de la Biblia dirigido por un pastor asociado.
Bernadette llegó a un estudio bíblico en particular que la abrumó. "Me sentía muy pesada, física y espiritualmente. No me di cuenta que ya estaba llorando cuando el pastor empezó a predicar", dijo ella.
Durante el estudio de la Biblia en grupo, el día de su cumpleaños número 36, Bernadette recibió a Jesucristo como su Señor y Salvador. Bernadette dijo que sentía la presencia de Jesucristo y se dio cuenta de que su bebé era precioso y una bendición de Dios.
"Cuando vine a Cristo, me arrepentí de mis pecados y de lo que estaba tratando de hacerle a mi bebé", dijo ella.
"Cuando vine a Cristo, me arrepentí de mis pecados".
Bernadette dejó de tomar alcohol y empezó a cuidarse mejor. En lo que crecía en su fe en Jesús, ella empezó a tener más paciencia con su esposo e hijos. Dice que siente un gozo en servir a su familia y a otros.
Pero no todas las personas estaban felices de los cambios en la vida de Bernadette. Después de abandonar sus viejos hábitos, sus amigos la perseguían. Y después de que la vieron asistir a un estudio de la Biblia, alguien difundió el rumor de que estaba loca.
"El Señor me ayudó a perdonar más. Cada vez que me siento ansiosa y quiero venganza contra los que me persiguen, yo leo la Biblia que me regaló Samaritan's Purse. A través de ella, Dios me dio autocontrol", dijo ella.
Bernadette tiene ahora siete meses de embarazo y continúa desarrollándose como madre y cristiana. El personal de Samaritan's Purse se ha convertido en un mentor para ella y las iglesias locales asociadas la están ministrando de forma regular en su grupo de madres.
"Jesús me da fuerzas para ser una mejor madre. Gracias, Samaritan's Purse por dirigirme a Él".